Rousseau publicó en 1775 su «Discurso sobre el origen de la desigualdad entre los hombres» donde postulaba que ‘la sociedad civil es una trampa perpetuada por los poderosos sobre los débiles, de modo que puedan conservar su poder y riqueza»… ¿Otros tiempos?
Vivimos en un país con un PIB que si se divide entre sus habitantes superaría los USD26.000 al año por persona, es decir, muchos millones de pesos y ad portas de lograr el tan ansiado «desarrollo».
El promedio no está mal sacado, pero es eso, un promedio.
El 82% de la riqueza mundial fue a parar al 1% más rico ¿promedio? No, consecuencia de usar promedios.
¿De qué sirve la igualdad como un derecho? ¿De qué sirve ser parte del club de países ricos? ¿De qué sirven los estudios de Rousseau, las reflexiones de Parra?
Tranquilos, los humanos tenemos el poder de elegir y tomar nuestras propias decisiones, «libre albedrío». Pero esperen… ¿Lo tenemos?
Si los promedios y las estadísticas son el estudio desde un punto de vista matemático, busquemos entonces un punto de vista ‘humano», al menos para cambiar el ‘promedio’….? ¿ ? En fin.
