Aferrarse al soltar.
¡Qué importa redondo o plano frente al olvido de la esfericidad?
Recuerda que vives en metros cuadrados y obvias la cubicidad.
Si se espera que la luna sea aquí traída, por qué no antes a sí preguntar ¿Se conoce la persona a sí misma? ¿Se conoce la tierra del agua su caudal?
Apodérate de un poco de cosmos para ti.